“Estamos cansados de hacer las denuncias, los hechos se ven acrecentados y nada podemos hacer para poner freno a estos actos delictivos en el ámbito rural”, dice en un comunicado la Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor).
“Expresamos nuestra solidaridad con la familia Barinaga y hacemos notar nuestro total y enérgico repudio ante este hecho delictivo y de brutal violencia”, a propósito del ataque del lunes al molino Trigotuc.
En todas partes
“La delincuencia no sólo está al día en la ciudad; también en el campo y las empresas del sector. Robo de ganado, de granos en silobolsas, maquinarias y herramientas de trabajo son los objetivos de la delincuencia”.
Agresiones a todos
Los dirigentes rurales dicen que “hoy ingresan a las casas con tal violencia que agreden a mujeres, niños y ancianos sin nada importarles. Atrás quedó la tranquilidad que sentíamos al vivir en el campo, donde se dejaba la puerta abierta, las llaves en la camioneta y las ventanas sin rejas”.
Finaliza advirtiendo que “lo peor que puede pasar es el acostumbramiento y la resignación” y reclama a las autoridades que tomen cartas en el asunto.